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Me senté al lado de él.
Tenía encendida una pequeña hoguera.
No me miraba a la cara, solo miraba para el mar con una mirada muy intensa y con los ojos humedecidos de haber llorado.
El silencio nos invadía solo se escuchaba las olas del mar y como ardía la pequeña hoguera.
-Ariadna: Te creo. -dije muy seca-
Él seguía mirando al horizonte y sin dirigirme palabra alguna.
-Pablo: De que me sirve eso..
-Ariadna: ¿Qué?
-Pablo: Te gusta Logan...lo he notado en tus ojos.
-Ariadna: ¿Como se nota eso en los ojos? -dije nerviosa-
-Pablo: Simplemente la forma de mirar a alguien, la forma de la que te brillan los ojos. Noto cuando una persona miente o cuando una persona esta enamorada, no me preguntes él por que.
Me quedé en completo silencio.
-Pablo: ves...
-Ariadna: Sabes, no te voy a mentir, ya que dices que lo notas en una mirada. Hubo un momento de esta semana en el que lo pensé, pensé que Logan empezaba a gustarme, pero...pensé en ti al instante y me quité eso de la cabeza, no me gusta, no soy capaz de amar a dos personas a la vez, Pablo. Es pensar en lo que he vivido contigo, en lo que aportas para mi vida, en lo que eres para mi, en todo, no soy capaz de querer una persona que apenas aporta algo para mi vida y tú si que lo haces.
Se quedó en silencio y me miró.
-Pablo: Me a encantado escuchar eso, tanta sinceridad en apenas unas pocas palabras. -me dijo seriamente-
Nos volvimos a quedar en silencio.
-Ariadna: Creo que desconfié en ti y en tus palabras, es normal que lo haya hecho ya que anteriormente me pasó lo mismo con Izan, pero...cuando me has dicho eso en mi habitación, he mirado tus ojos, tu forma de expresarte y la forma en la que mirabas mis labios mientras me los mordía.
-Pablo: No sabes lo que es mirarte los labios y no poder besarlos, 1 semana y media sin tus besos, ya me entiendes. -dijo mirando hacía abajo-
-Ariadna: Pablo..
-Pablo: Dime.. -dice con la cabeza aun abajo-
-Ariadna: Mirame, mirame a los labios.
Levantó la cabeza y se quedo mirando mis labios con deseo.
Me acerqué a él y le bese.
Nuestros labios se fundieron en un apasionado y largo beso.
Se separó de mi lentamente de mis labios y sonrió tímidamente.
-Pablo: He estado estos días con el mono, el mono de darte uno de estos besos y de poder decirte...
-Ariadna: Te quiero -le corté-
-Pablo: Sí...eso mismo. -sonreía-
Siempre quedaban espacios en silencio entre nosotros.
Silencio y más silencio.
-Pablo: entonces....
-Ariadna: Sí...
-Pablo: Vale...
Sabía perfectamente que se refería a que si estábamos de nuevo juntos. Y efectivamente.
Me levanté y me acerqué a la orilla de la playa.
Pablo se levantó y me siguió.
Me quedé mirandole sonriente y el me devolvió la sonrisa con una sonrisa vergonzosa.
-Ariadna: Te quiero. -le dije mientras me tiraba encima de él-
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Pasó la noche y fuimos a mi casa.
Entramos por la puerta y quedaba poca gente en la fiesta.
Fuimos rápido a mi habitación y tiré a Pablo a mi cama.
-Pablo: ¿Ahora? -reía-
Asentí con la cabeza y riéndome.
-Pablo: ¿Con toda esa gente fuera?
Me acerqué a la puerta y puse el pestillo.
Volví a asentir con la cabeza.
-Pablo: Bueno vale -reía-
Me tiré sobre él y comencé a besarle mientras el desabrochaba los botones de mi camisa azul.
-Pablo: a esto se le llama una buena reconciliación -decía riendo mientras se desabrochaba el cinturón-
-Ariadna: Cállate anda -reí-
Le quité los pantalones y se quitó la camiseta y se tiró sobre mi.
-Pablo: Te echaba de menos.
-Ariadna ¿Todo este tiempo? ¿Has pensado en mi sonrisa y en mi forma de caminar? -dije riendo-
-Pablo: Todos siempre con la misma tontería -me decía riendo mientras besaba mi cuello-
Pues la noche continua como pensáís, no hay nada más que añadir.
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NARRA PABLO
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Me desperté a las 9 para poder irme a grabar Tanto.
Abrí los ojos despacito y vi a Ariadna con la espalda desnuda y mirando hacía otro lado con una sabana blanca tapándole.
Como echaba de menos esto.
Me acerqué a ella y le bese la espalda.
Tocaron a la puerta de la habitación.
-Pablo: Un momento por favor.
-Jessica: Anda pero si esta el señorito aquí, no me lo esperaba -decía ironicamente y gritando por detrás de la puerta-
Me pusé unos pantalones y abrí la puerta.
-Jessica: Uooooooooo, Pablo no intentes seducirme con ese cuerpazo sexy. -reía-
-Lolo: Cuidao' que estoy en la cocina y lo escucho todo, eh. -Decía riendo y gritando-
-Pablo: Dime -reí-
-Jessica: Nada nada, solo quería despertar a Ariadna para que se vaya a trabajar pero mejor la despiertas tu -ríe-
-Reí y cerré la puerta-
Volví a abrir la puerta.
-Pablo: Ah, Jessica....-me miró- Gracias -le sonreí y me acerqué a ella dandole un beso en la frente-
-Jessica: No hay de que tonto -sonreía y se marchó hacía la cocina-
Entre en el cuarto y cerré la puerta.
Me tiré encima de Ariadna.
Abrió los ojos y me sonreía
-Pablo: Buenos días enana.
-Ariadna: Bueeeeenos días feo. -me dijo dandome un pequeño beso-
Se levantó y se puso algo en la parte de arriba.
-Ariadna: Y ahora me toca ver a la bruja, dios, que bieeeeeeeeeeeeen. -decía ironicamente-
-Pablo: A mi me parece maja. -reí-
Me miró con cara de asesina.
-Pablo: Bueno va, un poco bruja si que es. -reí-
-Jessica: chicos esta noche hay cena de amigos en casa de Lolo.
-Pablo: ¿Quien irá?
-Jessica: Antonio, David, Porty, Lolo obviamente, yo, tu, Ariadna, la novia de David y María y ya esta.
-Pablo: Vale bien bien bien.
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Ya era por la noche y todos estábamos sentados en la mesa cenando.
Lolo se levantó haciendo un sonidito con la copa y la cuchara para que le escuchemos.
-Lolo: Quiero deciros algo muy importante.
Todos estábamos atentos a lo que quería decirnos.
-Lolo: VOY A SER PADRE.
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